La odontología materno infantil es una de las ramas especializadas de la odontología que más dudas y consultas plantea a las mujeres, sobre todo a las primerizas y que en nuestra clínica dental de Madrid tratamos de resolver con la profesionalidad y solvencia que nos caracteriza.
Esta especialidad se encarga del cuidado dental de las mujeres embarazadas, así como de su bebé desde que se encuentra en el útero materno hasta aproximadamente los doce primeros meses de vida. Se trata de una odontología principalmente preventiva, donde se enseña a la madre a tener unos buenos hábitos de higiene que también pueda transmitir a su bebé en el futuro. El objetivo es reducir al máximo las infecciones bucales y controlar la transmisión de bacterias cariogénicas al bebé, de esta forma se mantiene al niño libre de caries el mayor tiempo posible.
La mujer embarazada sufre una serie de cambios fisiológicos importantes en relación a su salud bucodental. Por un lado, los desajustes hormonales afectan a las encías que pueden provocar un aumento de la movilidad de las piezas dentales. Es lo que se conoce como gingivitis del embarazo. Las encías sufren una inflamación que producen mayor sensibilidad y un sangrado espontáneo.
También pueden notar un aumento de la sequedad bucal (xerostomía) o, todo lo contrario, un exceso en la producción de saliva. Otros aspectos importantes a reseñar son los cambios en la dieta de la embarazada y sus hábitos de alimentación, lo que puede incrementar el riesgo de contraer caries e incluso pérdida dental.
Según distintos estudios se ha demostrado la relación entre unos hábitos higiénicos pobres y distintos problemas en el embarazo, donde también se incluye el parto prematuro y el bajo peso del bebé al nacer. También hay expertos que señalan la importancia de evitar la aparición de las bacterias periodontales, ya que podrían provocar contracciones uterinas y la dilatación prematura del cuello del útero provocando un adelanto del parto.
Por tanto es muy importante para la futura mamá disponer de una buena salud bucodental y un buen servicio de odontología materno infantil para evitar desequilibrios y que su bebé crezca sano y fuerte. No hay que olvidar que la salud oral es una parte integral muy importante de la salud general del niño. Para contribuir a ella, la odontopediatría trata el cuidado oral, tanto a nivel preventivo como terapéutico, para niños y adolescentes. Su principal objetivo es que el niño tenga una actitud de concienciación de la importancia que tiene mantener una buena salud bucal.
De esta forma se consigue la cooperación y confianza del niño con el odontólogo y se siembra una relación fructífera para el futuro, evitando fobias y generando interacciones positivas con el especialista y su equipo instrumental. La sociedad española de odontopediatría recomienda que la primera visita a la clínica dental de Madrid sea cuando se haya completado la erupción de las primeras 20 piezas que componen la primera dentición, más o menos a los tres años de edad.
En esta primera visita, el odontopediatra examinará dientes, encías y la mandíbula del niño para comprobar que todo está en perfecto estado. Además, el profesional informará a los padres sobre la mejor dieta posible en relación con la higiene bucal del niño, así como la gestión de ciertos hábitos bucales como el uso del chupete o la succión digital.
Volviendo a la odontología materno infantil, otros puntos a tener en cuenta es fomentar la lactancia hasta, al menos, el sexto mes de vida y si el niño se queda dormido mientras se alimenta, limpiar sus dientes antes de acostarle. En cuanto al uso del biberón es importante no agregar ningún tipo de azúcar y tratar de abandonarlo progresivamente a partir del primer año de vida y luego definitivamente durante las erupciones molares. Hay que prescindir de él cuando se están produciendo las primeras erupciones.
En cuanto al uso del chupete es aconsejable retirarlo progresivamente a partir del primer año y no utilizarlo hacia los dos años. La higiene bucal debe administrarse por parte de los padres hasta que el niño sea autónomo, que puede ser desde los seis a los ocho años. Antes de los primeros dientes se puede empezar con la higiene una vez al día después de cada toma de leche utilizando una gasa húmeda. Después de la erupción de los primeros dientes, la higiene dental se debe hacer con un dedal de silicona una vez al día o con un cepillo infantil sin dentífrico. Después de la erupción de los primeros molares ya se puede utilizar el cepillo dental infantil. No se puede utilizar ninguna pasta dental con flúor hasta los tres años por riesgo de fluorosis.
Desde nuestra clínica dental de Madrid queremos ofrecerle el mejor servicio de odontología materno infantil y les esperamos con los brazos abiertos para cualquier duda o sugerencia que tengan respecto a este tema o a otros que puedan preocuparle.