En nuestra larga experiencia de más de cuatro décadas en nuestra clínica dental de Madrid sabemos que hay enfermedades comunes en los dientes que una gran parte de la población va a sufrir en algún momento de sus vidas. Algunas no son demasiado importantes y se resuelven de manera sencilla, otras sin embargo pueden ser peligrosas si no se tratan a tiempo.
La mayoría de los problemas en los dientes están relacionadas con la alimentación, es decir, el seguimiento de dietas que perjudican seriamente a los dientes encías, y también con la falta de higiene. Además, muchas personas desarrollan enfermedades bucodentales por la única razón de no acudir al odontólogo a las revisiones habituales.
Por eso, nuestras dos recomendaciones principales van orientadas a adoptar hábitos de higiene bucodental saludables y a visitar cada seis meses o un año como mínimo la clínica dental. Es la única forma de que el odontólogo pueda detectar algún posible problema en el paciente y tomar las medidas necesarias para erradicarlo a tiempo.
Hay que recordar que los dientes son piezas esenciales para la salud general del individuo y que, una vez que salen los dientes definitivos, debemos cuidarlos y protegerlos porque serán los que nos acompañen el resto de nuestra vida. Su importancia es vital para una buena masticación y deglución de los alimentos, para pronunciar bien las palabras y también para lograr un efecto estético adecuado para la persona. Muchas enfermedades generales están relacionadas con una enfermedad dental o con una higiene bucal deficiente.
Por tanto, no nos cansaremos de recordar la importancia de tener una buena higiene bucodental y mantener tanto los dientes como las encías en perfecto estado ya desde niños. Si se comienza desde temprana edad con buenos hábitos de higiene se conservarán hasta la edad adulta y se evitarán muchos problemas y enfermedades.
Las revisiones en la clínica son de vital importancia
Los padres sí que cumplen escrupulosamente las visitas al odontólogo de sus hijos porque se preocupan por su salud bucodental y no quieren que tengan que pasar por enfermedades, sin embargo, ya de adultos, no se toman tan en serio las visitas al odontólogo y pueden pasar muchos meses, o incluso años, hasta que no tienen más remedio que acudir porque sufren alguna afección que necesita intervención profesional.
Es imprescindible acudir al odontólogo como mínimo una vez al año para llevar a cabo una limpieza profunda de dientes y encías además de recibir un examen exhaustivo para detectar cualquier anomalía en la boca del paciente. Es la mejor fórmula de prevención, ya que si se detecta a tiempo una enfermedad siempre hay más posibilidades de contrarrestarla lo antes posible.
Las personas que sufren enfermedades periodontales (gingivitis y periodontitis) deben visitar con más asiduidad la clínica para comprobar el estado de su afección y recibir el tratamiento necesario en el momento adecuado. Por tanto, resulta imprescindible seguir siempre las indicaciones del odontólogo en todo momento y cumplir con las fechas de revisión que marca.
Principales enfermedades comunes de los dientes
Estas son las enfermedades dentales más comunes que hemos podido comprobar en nuestro día a día de la clínica. Por supuesto hay otras, pero quizá estas son las más generalizadas. Vamos a verlas:
Caries
Es la enfermedad de los dientes más común entre la población y la padece una de cuatro personas en el mundo. Se produce por la colonización de bacterias en el interior del diente debido casi siempre al consumo excesivo de azúcares. Las principales causas que desarrollan las caries son, por un lado una dieta inadecuada con excesivos alimentos o bebidas azucaradas y, por otro, una higiene bucodental deficiente que no elimina de manera eficaz las bacterias acumuladas.
El resultado es que las bacterias eliminan poco a poco los minerales de los dientes y se introducen en el diente llegando, en los casos más graves, hasta la pulpa, también conocido más popularmente como “nervio”. Si no se trata a tiempo una caries de este tipo, el paciente podría incluso a perder la pieza. Afortunadamente, la caries tiene tratamientos efectivos pero es necesaria una detección rápida. Nuestro consejo siempre es el mismo: una buena higiene bucodental es el mejor tratamiento preventivo contra la caries.
Periodontitis
La periodontitis se origina por una inflamación continuada de las encías que ha sido provocada por bacterias. Es una de las enfermedades dentales más peligrosas ya que, si no se trata a tiempo, va reduciendo la estructura ósea que sostiene los dientes y en casos extremos puede provocar la caída de las piezas.
La gingivitis es la afección inicial que deriva en periodontitis si el paciente no recibe un tratamiento adecuado. Para atajar la periodontitis es importante realizar una limpieza en profundidad del sarro que se ha acumulado entre los dientes y debajo de las encías. Esto se consigue con un raspado de la raíz de las piezas dentales. En los casos más graves se puede recurrir a la cirugía periodontal para eliminar las bolsas de bacterias que se forman dentro de las encías.
Esta enfermedad necesita un mantenimiento continuado y puede resultar crónica en algunos pacientes. Por tanto debe acudir a la clínica dental cuando sea necesario para que el especialista examine el estado de los dientes o muelas afectadas y tratarlas adecuadamente.
Bruxismo
El bruxismo consiste en apretar los dientes con fuerza durante largos periodos de tiempo. Suele producirse durante la noche, cuando el paciente duerme, aunque también puede darse el resto del día. Los pacientes suelen quejarse de fuertes dolores de cabeza y de mandíbula. Una de las principales causas es el estrés, aunque hay otras causas que no se conocen con certeza.
La fricción de los dientes produce una pérdida paulatina del esmalte dental. Esto puede ocasionar sensibilidad al paciente a la hora de ingerir alimentos o bebidas demasiado frías o demasiado calientes. El tratamiento utilizado para el bruxismo consiste en la instalación de férulas acrílicas que eviten el roce de los dientes.
Manchas dentales
El paso del tiempo origina un desgaste inevitable en los dientes y, poco a poco, aparecen manchas que no solo afectan a la estética del paciente, sino también a su salud bucodental. Las principales causas de los dientes amarillentos son el tabaco y el consumo de sustancias como el vino tinto o el café. Por supuesto, la mala higiene dental es otra de las causas que se puede evitar por parte del paciente. Este tipo de manchas se pueden eliminar con tratamientos de blanqueamiento dental.
Hay otras manchas no visibles, y más peligrosas que están relacionadas con enfermedades potencialmente graves y que deben ser valoradas por un profesional cuanto antes.
Para evitar estas enfermedades comunes de los dientes visite nuestra clínica dental González Baquero. Allí le diremos la manera de mantener una buena higiene dental y las visitas recomendadas al odontólogo. Pida cita con nosotros y luzca siempre dientes bellos y sanos.