Según un estudio desarrollado por la Academia Sahlgrenska de la Universidad de Gotemburgo (Suecia), la dentofobia (miedo a acudir al dentista) es un problema que aumenta continuamente en la población y que necesita soluciones para rebajar las estadísticas. Según este estudio, el 50 por ciento de la población adulta mundial sufre algún tipo de miedo a la hora de acudir a las clínicas dentales y, en los casos extremos, puede derivar en un estrés extremo y una fobia dental, lo que conlleva un perjuicio importante en su salud bucodental.
En el estudio de la universidad sueca, se analizaban las estrategias utilizadas por los pacientes para superar el miedo a acudir al dentista. Un experimento consistía en rellenar un cuestionario donde los pacientes contaban lo que hacían para soportar mejor los tratamientos dentales.
Entre los recursos utilizados estaba el de la autoeficacia, es decir tratar de repetirse a uno mismo que es capaz de superar el tratamiento y que es lo suficientemente fuerte para superar el miedo que supone ponerse en manos de un especialista. Otra forma es la auto-distracción, es decir, tratar de distraer la mente con pensamientos agradables, juegos mentales u otro tipo de estrategias para no focalizarse en el tratamiento dental y así neutralizar el miedo a enfrentarse a él.
Otros pacientes utilizaban la técnica del distanciamiento, tratar de apaciguar todas las sensaciones relativas a la intervención del odontólogo y pensar que no son tan desagradables como en un principio se intuía. También hay casos de personas que rezan o interiorizan una oración para que el tratamiento termine cuanto antes y padezca el menor daño posible. La utilización del optimismo como técnica para contrarrestar el miedo es otra opción para muchas personas. Tratan de pensar que todo será fantástico cuando termine el tratamiento dental.
Pero sin duda el mejor dato que nos deja este estudio en cuanto a sus conclusiones es que la mejor forma de superar el miedo a los dentistas es el sentido del humor, no sólo por parte del paciente sino también por el del especialista, ya que está demostrado que una actitud positiva y agradable reduce el estrés y aumenta el bienestar. Por tanto el especialista también es responsable de crear un ambiente distendido y confortable en su gabinete para romper las barreras psicológicas y demostrar al paciente que no hay ningún miedo que temer.
En nuestra clínica dental de Madrid, nuestros profesionales tienen una larga experiencia en el tratamiento de pacientes con este tipo de problemas y siempre tratamos de generar el mejor ambiente posible desde el momento que la persona entra por la puerta. Una sonrisa siempre es de agradecer y en nuestras instalaciones obtendrá el trato más cercano y profesional para que sus tratamientos dentales sean lo más agradable posible