Hoy en día todos somos conscientes de la importancia de la salud bucodental y de que hay muchos problemas que amenazan una boca sana y no repercuten en la estética de la sonrisa. Incluso los niños son conscientes de la necesidad de lavarse los dientes correctamente para evitar caries y mantener una buena salud.
A consecuencia de esta cultura sobre la salud de la boca que hemos adquirido en pocas décadas, nos encontramos en el mercado con una oferta en pasta dental que puede llegar a abrumarnos. Si a principios de los años ochenta nuestro mayor dilema era elegir entre marcas, sabores y, a lo sumo, si usas pasta fluorada o con acción antisarro, ahora la más humilde pasta de dientes se presenta en diferentes versiones, unas dedicadas a prevenir patologías periodontales, otras que permiten mantener la duración de los tratamientos de blanqueamiento dental y, para los indecisos, las pastas dentales multiacción.
Incluso los profesionales de la salud dental podemos despistarnos con tanto lanzamiento de nuevas formulaciones, por lo que cómo no vas a hacerte un lío si solo buscas un producto para la higiene dental que te ayude a prevenir problemas como el mal aliento o la gingivitis y evite a medio plazo dolencias bucodentales.
Cada boca tiene unas necesidades prioritarias a la hora de evitar la pérdida dental y las infecciones o problemas estéticos como las manchas y los requerimientos de la pasta dental indicada se van modificando con los años y en función de circunstancias puntuales como un déficit vitamínico. Por tanto no podemos decir “esta es tu pasta dental ideal, no uses otra”, sino que es mejor ayudarte a elegir cuál te conviene más dependiendo de las circunstancias particulares de tu boca en cada momento.
Tipos de pastas dentales
Cómo norma general, los dentífricos multiacción no ofrecen una efectividad notable en casos de problemas serios, aunque son una buena opción de mantenimiento. Entre los dentífricos específicos, cabe destacar los siguientes:
Dentífricos para niños
Se elaboran con sabores suaves para acostumbrar a los más pequeños a cepillarse los dientes sin prisas, pero lo más importante de estas pastas de dientes es su concentración en flúor, inferior a la de los adultos.
El flúor es indispensable para asegurar la salud mental en países donde el agua se trata con productos clorados, pero puede producir la aparición de manchas dentales si se usan concentraciones elevadas. Por ello, en los sitios donde la potabilización del agua incluye un tratamiento con productos derivados del flúor y no del cloro, la gente suele evitar este ingrediente en sus dentífricos.
En el caso de los niños muy pequeños, también se usan bajas concentraciones de flúor para prevenir intoxicaciones en caso de ingesta accidental o de un mal aclarado.
Sin embargo, en el caso de niños de más de siete u ocho años, cuando el esmalte dental es quebradizo puede ser necesario usar pastas dentales bifluoradas o trifluoradas, que continúan manteniendo una formulación adaptada a la edad de los niños, reduciendo los niveles de mentol y la presencia de ciertos componentes que son motivo de debate con respecto a la relación riesgo/eficacia. Este tipo de dentífricos infantiles con mayor contenido en flúor no suelen ser para uso continuado, sino que se emplean unos meses con el fin de reforzar el esmalte.
Dentífricos con tratamiento para las encías
Las enfermedades periodontales tienen una serie de grados. No es común aparecer con una piorrea en pocos días. Así, la gran mayoría de enfermedades de las encías se tratan con pastas de dientes especiales, combinadas a menudo con colutorios de tratamiento y, si fuera necesario, con antibioterapia por vía oral. Pero, en la mayoría de los casos, una buena pasta de dientes para el tratamiento de las encías inflamadas usada una temporada suele resolver el problema. Pregunta a tu odontólogo o a tu farmacéutico, ya que estos dentífricos suelen venderse solo en farmacias o parafarmacias.
Dentífricos antimanchas
Los dentífricos antimanchas no son milagrosos o, dicho de otro modo, tienen truco. Por un lado, realizan una acción de arrastre que debe ser lo suficientemente suave como para no agredir el esmalte dental con el uso prolongado, con lo que van bien si hemos dejado el café o el tabaco, pero no consiguen librarse de unos dientes amarillentos si no modificamos nuestros hábitos. Pero, por otro lado, nos ayudan con un truco óptico, un blanqueamiento instantáneo y efímero que se consigue con el dióxido de titanio. De esta forma nuestra sonrisa luce más blanca desde el primer día pero recuerda: es un truco visual que de nada sirve si has tomado tetraciclinas en la infancia o eres un incondicional del café negro.
Estos son los principales tipos de dentífricos, incluyendo algunos de tratamiento. Recuerda que, en ocasiones, tu higiene dental necesita complementarse con colutorios u otros productos. Consulta tus dudas a tu odontólogo cuando notes algún cambio en el buen estado de tu boca y no te saltes las revisiones periódicas, porque detectan a tiempo problemas que pueden poner en riesgo tu salud en general.