En nuestra clínica dental de Madrid atendemos todo tipo de afecciones como un quiste en la encía, que es bastante común. Se trata de una dolencia que al principio es asintomática, de tal forma que solo con radiografías o pruebas de imagen se puede detectar. Vamos a profundizar un poco más en los quistes bucodentales y sus tratamientos.
Definición de quiste dental
También conocidos como quistes odontogénicos, son unos bultos, o cavidades anormales, situadas dentro de la boca que suelen contener pus en estado líquido o semisólido. El quiste se compone de una capa con un tejido de varios estratos de tipo escamoso que puede causar importantes daños en el interior de la mandíbula, en la encía o en el hueso maxilar. Algunos pacientes pueden presentar pequeñas deformidades en la zona del quiste o también movilidad de los dientes contiguos.
La buena noticia es que no supone una lesión peligrosa siempre que sea detectada a tiempo y se administre el tratamiento adecuado por parte del especialista. Si no es así, el quiste podría derivar en la pérdida de piezas dentales, aunque esta sería una situación extrema que no suele darse a menudo.
¿Qué tipos de quistes existen?
Normalmente hay dos tipos de quistes odontogénicos de carácter benigno. Son los siguientes:
Quistes dentales de desarrollo
Son quistes que aparecen por diversas alteraciones en los tejidos epiteliales de los dientes y la principal causa son los dientes que no han erupcionado o los dientes que han quedado retenidos. Los restos de estos tejidos originan los quistes de este tipo y deben ser tratados en el menor tiempo posible.
Dentro de esta categoría encontramos los fibromas, unos bultos duros que aparecen en la encía, la lengua o los labios. No generan demasiadas molestias, solo cuando se irrita la zona. Las personas con prótesis removibles o mal ajustadas suelen ser más propensas a este tipo de quiste que no tiene su origen en un proceso infeccioso. Es importante eliminar el factor que produce la irritación y después proceder a extirpar el bulto.
Quistes inflamatorios
Este tipo de quiste suele aparecer por efecto de infecciones de tipo inflamatorio derivadas de afecciones bucodentales como la periodontitis, por ejemplo. Aunque son quistes de carácter benigno, su aparición pueden ocasionar la pérdida de pulpa dental.
En esta categoría están los abscesos gingivales, unos quistes en la encía de origen infeccioso propiciado por las bolsas periodontales. Los abscesos se producen por inflamación de las papilas que rodean al diente y la posterior infección. Se suelen tratar con antibióticos y después se limpia la zona con curetaje. Tanto los abscesos, como las fístulas, aparecen por distintas razones, como la caries dental, una endodoncia mal ejecutada o la erupción del tercer molar.
Síntomas de quistes odontogénicos
Como hemos dicho anteriormente, en las primeras fases de la aparición de un quiste es muy probable que no haya ningún síntoma. Sin embargo, según avance el proceso podrían producirse desplazamientos dentales o incluso, en casos graves, provocar la pérdida de alguna pieza dental.
Es muy importante tratar los quistes con rapidez, de ahí que las visitas periódicas a la clínica dental sean tan importantes. En cualquier revisión rutinaria, el odontólogo puede detectar la formación de un quiste y comenzar el tratamiento cuanto antes. Es la mejor forma de prevención para evitar o contrarrestar este tipo de lesiones.
Tratamientos utilizados para los quistes dentales
La cirugía es el tratamiento más efectivo ante la aparición de quistes dentales. Su finalidad es extirpar el quiste en su totalidad eliminando todo el material y tejidos infectados y dejar la zona totalmente limpia para evitar que vuelve a reproducirse.
No todas las clínicas dentales disponen de un cirujano bucodental con la experiencia y la cualificación necesaria. Acudir a un cirujano bucal experto es muy importante, ya que, gracias a la pericia de estos profesionales, en muy poco tiempo el quiste podría eliminarse de la boca.
Pero la intervención del profesional no solo es importante a la hora de extirpar el quiste, sino también en el estudio previo, la planificación de la intervención y el postoperatorio. Hay que recordar que un porcentaje mínimo de quistes, en caso de no recibir tratamiento, podrían terminar siendo malignos y provocar consecuencias mucho peores.
Los quistes odontogénicos aparecen indistintamente en hombres y mujeres de cualquier edad y en cualquier momento de la vida. Es importante que el paciente se observe por si se detecta alguna anomalía, aparte de acudir a la clínica cada seis meses para ser examinado por un odontólogo. Los quistes en la encía y los situados en los huesos maxilares son bastante frecuentes, por eso la detección precoz de los quistes resulta esencial para poder eliminarlos cuanto antes.
La valoración previa del quiste suele hacerse con un escáner para comprobar la extensión su posible origen y cómo ha afectado a las estructuras adyacentes. Dependiendo del estado del diente, si tiene endodoncias o no, el estado de los dientes vecinos, el tamaño del quiste y otros factores, se procederá a la extracción del quiste.
En la intervención se utiliza anestesia local y la duración oscila entre los 20 y los 30 minutos dependiendo de cada caso. Es un procedimiento totalmente indoloro y el postoperatorio incluye algunas molestias muy ligeras para el paciente que tiene que seguir una dieta blanda durante varios días.
Pasos en la extracción de un quiste dental
Antes de la extirpación del quiste, el especialista valorará si es necesaria la endodoncia o reendodoncia de los dientes afectados, junto con la exodoncia de los dientes que no tengan viabilidad. Después se produce una obturación para conseguir el sellado del diente y así evitar la reproducción del quiste.
El siguiente paso es la reconstrucción de la zona afectada mediante hueso artificial o del propio paciente. En el caso de los tejidos blandos afectados, también se procederá a una reconstrucción para evitar enfermedades periodontales y conseguir el mejor efecto estético posible. Cuando existen quistes dentales de un tamaño considerable, o cuyo origen no sea dental, es posible que se requieran tratamientos más avanzados.
En nuestra clínica dental de Madrid disponemos de los mejores profesionales y los últimos medios técnicos para velar por su salud bucodental. Pida cita con nosotros y resuelva todas sus dudas.